En este dibujo podemos observar líneas que son verdaderos trazos, líneas muy expresivas cuyos trazos definen la anatomía de las formas.
La línea es el componente segundo del lenguaje de las imágenes, después del punto. Surge cuando se mueve un punto por lo que es un elemento dinámico. La línea horizontal aparece como un elemento de reposo, de calma, de frialdad, sintetiza lo perecedero. La línea vertical es más vivaz, alegre, de movimiento ascendente, expresa calidez. La línea oblicua es una síntesis de las dos anteriores según se aproxima a una u otra. La línea oblicua suele interpretarse como algo dinámico, inestable, en tensión.
Frente a los vigorosos trazos anteriores en este dibujo observamos unos trazos que denotan una trama más sosegada, un conjunto de líneas casi paralelas que expresan mayor delicadeza y finura en el tratamiento técnico, elementos que menoscaban el efecto del trazo expresivo.
Podemos observar que cuando dibujamos una línea de trazo uniforme u otra variable según presionamos más o menos nuestro lápiz sobre soporte genera efectos distintos en el observador. Al utilizar una línea quebrada de grosor uniforme también podemos generar efectos de tensión, otras veces podemos crear sensaciones de relieve al trazar conjuntos de líneas que definen planos y estos planos generan al mismo tiempo superficies que construyen el volumen de las formas en el dibujo.
Líneas separatrices para manchas planas:
La línea.
Todas las formas de la naturaleza tienen su apariencia formal y volumen propios. Al transcribir dichas formas sobre el papel u otro material recurrimos al dibujo realizado con líneas ya que es una invención convencional que geométricamente se determina por la traza que deja un punto en su desplazamiento o bien por la sucesión de una serie de puntos en una dirección.
Las diferentes posiciones de una línea causan efectos distintos como por ejemplo, cuando es vertical, genera sensación de fuerza, robustez y equilibrio, mientras que el valor expresivo de la línea horizontal se transforma en quietud, calma, tranquilidad y de ausencia de movimiento. La línea inclinada sugiere acción, dinamismo, tensión y ante una inclinación o pendiente excesiva produce efecto de caída.
La línea tiene distintos contenidos expresivos, lo podemos verificar al variar el trazo de la misma o también al ejercer distinta presión sobre el soporte. De la misma manera la línea en su variable grosor e intensidad, obtiene distintas percepciones y la podemos obtener también variando la presión sobre el soporte.
La línea es un elemento básico de composición ya que puede estructurar la misma mediante su significación, por ejemplo, una línea quebrada de grosor uniforme puede generar un efecto de tensión, mientras que una línea fina organizada, ordenada, produce una sensación de tranquilidad,
La línea se puede combinar con efectos de color y de textura a veces combinando con un papel de mayor gramaje o de cierta irregularidad que provoca efectos de intensidad variable en manchas que se generan mediante líneas o bien mediante la variación en el grosor de la línea.
Las agrupaciones lineales producen efectos de sombra por regla general mientras que la separación de las mismas hacen efectos de luz. También las distintas líneas de nivel generan una percepción de construcción volumétrica.
La línea curva tiene gráficamente cierta libertad de ondulación y expresa dinamismo y movilidad y se puede utilizar para cerrar acciones en el tema del dibujo o pintura que se trate. La forma de ordenar las líneas sobre una superficie puede ser muy variada, desde la concentración lineal con elementos intercalados hasta las técnicas diferentes que producen sensaciones distintas, desde la pluma y tinta en colores hasta el trazo hecho con rotulador, variando con el bisel de la punta su dirección y su inclinación.
La línea también es un elemento estructural que consigue sensación de relieve mediante la composición de formas onduladas que generan efectos volumétricos. También se puede conseguir efectos del mismo tipo mediante la variación en la intensidad de las líneas generando efectos de planos diferenciados por agrupación lineal.
La línea puede estar sometida a la rigurosidad geométrica que expresa el delineante o a la expresividad de la soltura del artista. Ambas formas de concebirla generan distintas percepciones. Tenemos el ejemplo de la geometría utilizada en el arte, con círculos y cuadrados en un rigor técnico de trazado que construyen composiciones perfectamente estructuradas. También la geometría de estas líneas consigue sensaciones de luz y volumen por la diferencia de espacios entre líneas, por solapamiento y otros efectos plásticos como los de composiciones modulares de tipo lineal.
La línea dentro de la expresión figurativa narra contenidos de la obra, desde los efectos del grosor de la luz, de las texturas, de las direcciones de las transformaciones, que generan sus agrupamientos de la organización y estructura de conjuntos de líneas así como de los efectos de relación entre fondo y figura, elementos todos que rompen la relación fondo y figura y la bidimensionalidad del plano.
La línea es la trayectoria descrita por un punto que se mueve. Si lo hace de forma lineal recta produce una recta mientras que si lo hace de forma distinta genera una curva y si se sale del plano tenemos una curva alabeada.
Geométricamente solo tiene una dimensión pero en la práctica del dibujo tiene el grosor, la forma textura y color que le queramos dar, siendo imposible reducirlo a una única dimensión.También geométricamente se considera como la intersección de dos planos o de un conjunto de planos llamados radiación que pasan por la recta.
La clasificación gráfico-plástica es en líneas simples, que asimismo pueden ser rectas o curvas y la combinación de varias que produce compuestas, generando líneas quebradas, onduladas, mixtas o la composición de varias.
Compositivamente puede tener una capacidad expresiva, de reposo o estabilidad, como por ejemplo una línea horizontal, o de orden o caos si son líneas dinámicas en distintas direcciones y en posición oblicua, o efectos dinámicos, o generar efectos de profundidad o volumen, o por la repetición que genera, creación de ritmos, o por la repetición y cambio de dimensión que produce, efectos fractales de iteración, o por su homogeneidad efectos de quietud calma y tranquilidad.
Como elemento gráfico es esencial en el dibujo técnico y da una información descriptiva de lo que son las líneas en el plano y en el espacio. Es generadora también de creación de contornos y de tramas con distinto valor tonal.
La línea es también una representación gráfica de la trayectoria del punto en movimiento que sin grosor alguno, ya que tiene una dimensión, se considera de longitud infinita por regla general, si no, estaremos hablando de un segmento de línea o recta.
Se utiliza comúnmente en el dibujo para construir formas e imágenes geométricas, así como formas volumétricas para hacer efectos espaciales de perspectiva.
Las líneas pueden ser simples cuando están hechas con un solo trazo, que puede ser recto o curvo y se perciben con un solo golpe de vista, mientras que son compuestas cuando están formadas por fragmentos de dos o más líneas rectas o curvas y por regla general hay que desplazar la vista para poder distinguirlas.
Las líneas quebradas son las compuestas por fragmentos de líneas rectas. Las líneas onduladas están compuestas por fragmentos de líneas curvas. Las líneas mixtas están compuestas por fragmentos de líneas rectas y líneas curvas.
La ordenación de las líneas genera una trama organizada en una obra plástica.
Las líneas también por el indicio del trazo reflejan la personalidad del que las traza.
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